David se alarmó, pues la tropa hablaba de apedrearlo; y es que todos se sentían amargados por la pérdida de sus Señor hijos e hijas. Pero cobró ánimo y puso su confianza en el Señor su Dios.
1 SAMUEL 30:6
ANTES DE QUE DAVID LLEGARA a ser rey de Israel, él y sus hombres regresaron a casa y hallaron que su ciudad había sido atacada, sus hogares incendiados, sus posesiones saqueadas, y sus mujeres y niños secuestrados. Pero en vez de quedarse sentados llorando lo por que habían perdido, David los animó en el Señor y los con venció de atacar al enemigo. Mientras luchaban, Dios obró de forma sobrenatural, ayudándolos a recuperar todo lo que había sido robado.
Para vivir una mejor vida, usted debe trabajar su voluntad, no solo sus emociones. A veces eso significa que debe dar pasos de fe, incluso cuando esté sufriendo las consecuencias de un ataque del enemigo.
Desarrolle una mentalidad de vencedor y observe lo que Dios comienza a hacer.
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